Descripción: Esta buena práctica se enmarca en un proceso de remodelación urbana de un polígono de viviendas muy deteriorado situado en la periferia berlinesa. La necesidad de demoler cinco bloques de viviendas y el miedo de sus vecinos a perder su vivienda hizo que las instituciones públicas implicadas contaran desde el primer momento con la población residente —atendiendo especialmente a la infancia y tercera edad— para decidir la ubicación de los nuevos edificios y diseñar el espacio público resultante, contando con la ayuda de artistas, arquitectos y paisajistas.

Parte de la edificación existente se rehabilitó con obras de mejora en su accesibilidad (instalación de ascensores) y mejora de su eficiencia energética (intervención en fachadas y envolventes). El espacio resultante tras el derribo de los bloques más deteriorados se parceló junto con el resto del espacio libre existente. En ese proceso se consensuó con la población la localización de las nuevas edificaciones para realojar a la población y el diseño de los nuevos espacios libres. Respecto a este diseño, la población residente decidió crear espacios de topografía variada mediante colinas artificiales creadas con la tierra movida durante la remodelación, que se ajardinaron con césped y varias especies de pinos y frondosas. También se decidió instalar containers pintados de blanco que sirven como almacenes temporales para alquilar como aparcamientos de bicicletas, talleres, espacios de reunión, celebración de comidas, etc. Con la modelación de la topografía y la instalación de los containers blancos, la población pretendió recuperar el paisaje rural perdido simulando un rebaño de ovejas, que hoy es símbolo de este polígono.

Resultados: No se ha encontrado evaluación ni resultados del proceso de remodelación del polígono.

La intervención ganó el Premio Alemán de Arquitectura del Paisaje 2011